Tuesday, October 27, 2009

El Comando Cucharita.

Me tienen harto.
Todas aquellas personas que raptan las cucharitas que utilizan para prepararse su café, te, mate cocido o lo que fuere. No me interesa saber qué motivos o razones los llevan a cometer este tipo de infracciones, dejando abierta la posibilidad de dejar sin elementos con qué revolver a quienes venimos después y queremos prepararnos nuestro café, te, mate cocido o lo que fuere.

Hasta hace unas semanas, esta cuestión era doblemente rompe pelot*s dada la baja cantidad de cucharitas que los empleados de la editorial jurídica en la que trabajo disponíamos para los propósitos para los cuales fueron inventados tales utensilios. Por eso estaba siempre latente la posibilidad de que no podamos llevar a cabo nuestro cometido.

Alguno esgrimirá, con razón, que la empresa debería proveernos de una cantidad de cucharitas tal que cada cual tenga la suya (al menos en número, se entiende) pero si esto o no es así, o si lo fuere (ver abajo) de todas formas hay que erradicar esa por demás egoísta actitud.

Así que, ya lo saben:
- No te lleves contigo la cucharita luego de haberte preparado el café, te, mate cocido o lo que fuere, si es que no quieres ser el culpable de haber dejado a un compañero sin cucharita.

Me tienen harto.
Todas aquellas personas que luego de haberse preparado su café, te, mate cocido o lo que fuere, no lavan y devuelven a su lugar correspondiente la cucharita que han empleado, para que luego otro pueda utilizarla.

Desde hace unas semanas, esta cuestión se vio aliviada, en cierto sentido, ya que las cucharitas pasaron a igualar (o me animaría a afirmar que superar), en número a los empleados, con lo cual, cuasi siempre hay una cucharita disponible para que uno se prepare su café, te, mate cocido o lo que fuere. Pero ¿qué pasa? Confiados quizás en la multitud de cucharitas que ahora nos acompañan, muchos obvian una de las fases más importantes en la elaboración de sus bebidas, consistente en lavar, señores, lavar, las mismas, luego de su utilización.

Así que, ya lo saben:
- Recuerda lavar siempre la cucharita que utilices para preparar tu café, te, mate cocido o lo que fuere, porque cabe la posibilidad de que de esa manera le quites la posibilidad a otro de que tome una cucharita limpia y preparada y en condiciones óptimas para ser utilizada, obligándolo a realizar un paso extra previo a la preparación, paso extra que no debería existir si todos procedemos como corresponde.

Saludos.
SirThomas.

Sunday, October 25, 2009

SirMovies 2009. Entrega 12.

Momento de repasar una nueva tanda de películas que ha visto el staff del blog.

The Soloist (2009).
La gacetilla de prensa que nos llegó a la mesa de trabajo nos entusiasmó desde un comienzo. Allí se nos informaba que el dos veces nominado al Oscar, Robert Downey Jr. y el ganador del Oscar por Ray, Jamie Foxx eran los protagonistas. Que la historia estaba basada en sucesos reales, que incluía a un periodista y a una suerte de prodigio musical que por circunstancias de la vida ahora vagaba por las calles de Los Ángeles.

Las expectativas eran altas, las cuales no fueron colmadas del todo, por momentos la historia pierde fuerza, pero sin dudas es una película que podemos recomendar. Downey Jr., uno de los mejores actores de su generación y a quien próximamente veremos en Iron Man 2 y Sherlock Holmes, y Foxx , el actor negro que vendría a reemplazar a Denzel Washington, conforman una dupla sólida y creíble, la historia hace el resto.

Basada en el libro del periodista Steve López, The Soloist nos cuenta la historia de Nathaniel Ayers, el prodigio musical mencionado, quien luego de estar al borde de conocer la gloria, termina como homeless, tocando su estropeado violín en los suburbios de Los Ángeles, hasta que su historia es rescatada por López, quien tratará de ayudarlo para que retome su camino en la música.

De yapa les dejamos un link a un video en donde pueden conocer a los señores López y Ayers de la vida real.

Calificación: 7,50

Reservation Road (2007)
Pueblo chico, infierno grande, sería la frase que resume lo que sucede en esta película. En un pueblito perdido de los Estados Unidos, una familia sufre la pérdida de unos de sus hijos, que es atropellado por una camioneta, cuyo dueño no detiene la marcha ante el hecho consumado y huye, escapando de sus responsabilidades.

El reparto, un lujo: Mark Ruffalo, como el "malo de la camioneta", Joaquín "tiro los hombros para adelante" Phoenix, como el padre que lucha por la verdad y busca venganza, la siempre bella Jennifer Connelly, la madre del niño, y Mira Sorvino, conforman el cuarteto protagónico de este drama que nos cuenta el mismo hecho pero desde los dos lados de la historia, que terminarán por encontrarse inevitablemente.

A propósito, queda flotando la duda: ¿Tiene algún problema J. Phoenix que le provoca estar constantemente con los hombros hacia adelante, o lo simula nomás?

Calificación: 6.50

Sector 9 (2009).
Una divertida y refrescante película de ciencia ficción / comedia que nos llega desde Nueva Zelanda, con el padrinazgo de Peter Jackson. Dirigida por Neill Blomkamp y protagonizada por un tal Sharlto Copley.

La primera parte de la película se hace un poco tediosa pero apenas comienza la acción, no nos da respiro y termina entreteniendo. Buenos efectos especiales, gran performance de Copley.

Trailer: ACÁ.

Calificación: 8 tréboles.

State of Play (2009).
Un reparto estelar para este thriller que gira en torno al periodismo, la política, asesinatos, la corrupción, la seguridad nacional, los contratos sucios, la amistad y un sinfin de cuestiones.

Protagonizada por un sólido Russell Crowe, en el papel del periodista chapado a la antigua que comienza a investigar unos asesinados sin mucha relación aparente entre sí pero que finalmente sí la terminan teniendo, Ben Affleck, como el joven político incorruptible y de ascendente carrera, Robin Wright Penn, como la señora esposa de Affleck, y la bella Rachel McAdams, como la joven periodista que ayuda a Crowe en su investigación.

El filme, a pesar de transcurrir en la actualidad, tiene una estética "setentista", lo cual, a nuestros ojos, lo hace más atractivo.

También actúan: Jason Bateman, como una de las fuentes que termina ayudando a resolver el rompecabezas, y Helen Mirren, como la editora del diario en donde trabajan Crowe y McAdams.

Basada en una serie de seis capítulos de la BBC, que estamos prontos a ver también.

Calificación: 8 tréboles.

Shoot Em Up (2007).

Dijo Persiana Americana:

"Shoot 'Em Up relata la historia del señor Smith, un extraño solitario que decide vengar sin un motivo claro a una joven que era perseguida y posteriormente asesinada por un grupo de hombres. Para ello contará con la ayuda de una prostituta amiga quien lo ayudara a hacerse cargo de un bebé y deberá enfrentarse contra varios mafiosos, quienes intentarán matar al bebé.
Con tintes cómicos (la escena del disparo de la ametralladora con una zanahoria es divertida), buenas actuaciones (Clive Owen sobrio como siempre y Monica Bellucci lo acompaña de gran forma) y diálogos graciosos, Shoot 'Em Up nos muestra una clásica obra de acción pura."

Dijeron nuestros críticos:
"Coincidiendo con la crítica de nuestros colegas de Persiana Americana, Shoot Em Up entretiene de principio a fin, casi sin pausa, a fuerza de tiros, exageradas pero efectivas y bien logradas escenas de acción pura, diálogos graciosos e inteligentes. Destacamos, además de la performance Owen, la actuación del genial Paul Giamatti, brillante en su papel del "malo" de la película. Una película que, dentro de su género, la podemos ubicar dentro un top five de los últimos 10 años. Imperdible para los gustosos del cine de acción."

Trailer: ACÁ.

Calificación: 9 tréboles.


The Brothers Bloom (2008).
Trío de estrellas protagonizan esta singular comedia en la que los engaños están a la orden del día.

Dos hermanos, Adrian Brody y Mark Ruffalo (los hermanos en cuestión) viven engañando a la gente con el único fin de divertirse, pero uno de ellos (Brody) cansado de su ficcionada vida decide retirarse de la actividad, pero su hermano lo convence para una última función en la que intentarán embaucar a una millonaria y solitaria joven (Rachel Weizs), a quien "invitarán" para realizar un trabajo final, en el que el espectador no sabrá a ciencia cierta quién engaña a quién.

Calificación: 7 tréboles.

También vimos: The Mand From Earth, una película de muy bajo presupuesto, que pasó sin pena ni gloria por los cines, y que, gracias al boca a boca, (y a los torrents para su "distribución") se convirtió en una película de culto para algunos, de ahí nuestro encuentro con este filme.

En ESTE link encontrarán una buena y completa reseña acerca de la película.

Saludos.
SirThomas.

Thursday, October 22, 2009

Rara Costumbre.

Desde que inauguramos el blog, hemos ido contando diferentes manías, costumbres, hábitos, relacionados con el nuestro redactor en jefe. Confesiones que muy pocas personas se animarían a hacer públicamente han sido dichas aquí. Hemos contado, por ejemplo, la Manía de SirThomas con el volumen y el control remoto; también hemos hecho pública los aberrantes efectos que le provoca a nuestro redactor el viento frío en la cara, las dificultades que se le presentan al momento de cortar un papel con una tijera o lo bueno que es enhebrando agujas, y tantas otras revelaciones que habrán leído o pueden leer con sólo revisar nuestro archivo.

Esta pequeña introducción viene a cuento de una nueva confesión que nos dejó SirThomas, quien nos dio el permiso pertinente para que la publiquemos aquí, y es la siguiente:

"Desde que me compro algo de ropa hasta que me decido a utilizarlo pueden pasar varios días, semanas y hasta incluso meses. No sabría explicar a ciencia cierta el por qué de esta rara costumbre pero así sucede. Mi más reciente adquisición consistió en una campera "de verano" y un pantalón de gabardina azul, que no pienso utilizar hasta tanto venza ese temor a la primera vez".

Dato al margen: Campera + pantalón: $ 222, descuento de $ 55 incluido, no me quedó claro muy bien por qué, pero lo agradecí.

Saludos.
SirThomas.

Friday, October 16, 2009

Lo positivo.

Más allá de todas las controversias, de las declaraciones, del mal juego, de que se estuvo al borde del abismo, de que casi nos quedamos afuera, de las mamadas, de las zambullidas, de los errores, de las incoherencias, de las marchas y contramarchas, de los cantitos, aquí en este blog vamos a destacar los aspectos positivos que pudimos observar de esta última tanda de partidos por eliminatorias que disputó la selección argentina de fútbol.

Comenzando por lo que le gusta a muchos, repasaremos algunos números, comparándolos con la tanda anterior de dos partidos, aquella en la que se enfrentó a Brasil, en Rosario, y a Paraguay, en Asunción, y, yéndonos un poco más para atrás, con los partidos frente a Colombia (como local) y Ecuador (de visita)

- En estos dos últimos partidos, Argentina cosechó seis puntos sobre seis en juego, logrando así un ciento por ciento de eficacia.
- En los dos partidos anteriores: ninguno, derrotas 3-1 ante Brasil en Rosario y 1-0 con Paraguay, en Asunción.
- En la tanda previa se logró un triunfo, ante Colombia (1-0) en el Monumental, que sumó tres puntos a la causa, y una derrota (0-2) frente a Ecuador en Quito.

Tomando los cuatro partidos previos, entonces, tenemos que el seleccionado logró rescatar solamente 3 puntos sobre 12 en disputa, convirtiendo 2 goles y recibiendo 6 en su arco.
En los últimos dos, repasamos: 6 sobre 6 y 3 goles en dos partidos, contabilizando sólo uno en contra.

En lo que tiene que ver estrictamente con los números, observamos una clara mejoría respecto de los cuatro partidos previos.

Del juego en sí del equipo, de cómo se movió, de la idea táctica, no hablaremos demasiado, pero sí vamos a subrayar algunas decisiones técnicas y a algunos jugadores que en esta tanda de encuentros han aprobado con creces el examen titulado “me pongo la camiseta de la selección en partidos chivos y así y todo no desentono” (lo óptimo sería que el examen concluyera con un “la descoso”, pero como eso no se dio, nos conformamos con un aprobado).

- La inclusión de Aimar e Higuaín para acompañar a Messi en el ataque. Cambiando una vez más de nombres, el técnico argentino finalmente tomó la “valiente” decisión de dejar en el banco a quienes venían arrancando los partidos (Tévez y Agüero mayormente), que poco venían ofreciendo ofensivamente pero que eran número puesto a la hora de conformar el equipo. Muchos fueron los cambios en estos últimos meses (de nombres, hablamos) pero la dupla ofensiva (o el tridente) seguía resistiendo las críticas del afuera a fuerza de apoyo desde adentro. Por eso, vale destacar la decisión de incluir desde el arranque tanto a Aimar como a Higuaín (en el encuentro frente a Perú, el “pipita” repitió ante Uruguay).

- Aimar: dos años de ausencia en la Selección, presente no del todo brillante pero aceptable en el Benfica portugués, demostró que no le pesa convertirse en el conductor del equipo. Tuvo buenas asociaciones con Messi e Higuaín, aunque le faltó algo más de precisión para terminar de hilvanar las acciones y concluirlas de mejor manera y en mayor cantidad. Su primer tiempo ante Perú (sí, Perú, era el rival de turno, no otro) fue satisfactorio. En la segunda etapa se lo notó algo cansado y luego se desdibujó (junto con el equipo) lo que le costó su salida, siendo reemplazado por Insúa. Teniendo como atenuante que fue su primer partido y la poca preparación y adaptación a sus compañeros, alzamos el pulgar para futuras convocatorias para que cumpla una función que, según nuestro punto de vista, debería cumplir Riquelme (que, como sabemos, renunció a la selección nuevamente hace un tiempito y, como están dadas las cosas hoy día, está fuera del equipo).

- Higuaín: luego de todo lo que se habló de él y su ausencia en el seleccionado, finalmente fue citado por el entrenador (a pesar, incluso, de no estar en su momento más brillante, como en ocasiones anteriores) y cumplió con creces: se mostró muy activo en ambos partidos, aguantando muy bien la pelota cuando era necesario. Le tocó titularizar en los dos partidos (por presión) más complicados y no decepcionó. Lo ubicamos dentro de un podio imaginario en ambos partidos. Gol ante Perú, aprovechando una de las pocas (dos o tres) claras que tuvo para definir y solidaria tarea ante Uruguay, tratando de asociarse con sus, por momentos, lejanos compañeros, y con un “socio” de ataque que, nuevamente, brilló por su ausencia. Un “9” moderno que esperamos verlo en el Mundial. En partido y medio aportó más (sacando a Palermo y su gol milagroso ante Perú) que los rendimientos sumados de Tévez, Messi y Agüero, en los partidos anteriores (la cuota goleadora de esos cuatro partidos? El Cata Díaz y Jesús Dátolo), aunque aquí nos referimos más al aporte al juego de equipo en sí, vale el dato estadístico también.

- La defensa: repasábamos al comienzo los números de estos últimos seis partidos y una de las mejoras fue la escasa cantidad de goles sufridos, en parte por ineficacia del rival, desde luego, pero también por una tarea más sólida desde sus componentes. Por historia y rendimientos cercanos, y más allá de los constantes cambios que introdujo el entrenador, en estos últimos dos partidos no se cometieron tantos errores como en las previas presentaciones (mejor en el Centenario que en el Monumental)

- El retorno de Demichellis: luego de una inactividad por lesión volvió a las canchas con la camiseta de la selección sin haber tenido minutos con su equipo, y ante Uruguay fue uno de los puntos más altos de la selección. Sólido, mostró seguridad en sus intervenciones. Saludable retorno.

- Lo mal que se jugó y los nombres. Resaltamos esto porque quizás, o eso esperamos, éste (tomando sobre todo los previos cuatro partidos) haya sido el piso de la selección en cuanto a rendimiento, dejando mucho espacio para mejorar, progresar, encontrar el equipo, esquema y estilo de juego óptimo de cara a lo que realmente importa, el Mundial.

Podio de rendimientos positivos de estos dos partidos:

- Higuaín
- Verón (líder natural del equipo, eje conductor, manejador de los tiempos, etcs).
- Demichellis

Menciones especiales para el arquero Romero (de buena actuación también en la derrota ante Paraguay), Mascherano, a pesar de su taco mágico, logró subir su nivel cuando el equipo más lo precisaba aunque ya desde hace un tiempo no es el “mascherano que todos conocemos” (y quizás no lo veamos más) pero sin dudas, aprobó el examen. Heinze, sí, Heinze, sobre todo por lo hecho en Uruguay.

No son muchos, nos gustaría que fueran más, pero al menos hemos podido rescatar algunos puntos positivos del rendimiento de la selección en estos dos últimos partidos que le terminaron dando la clasificación directa al Mundial de Sudáfrica 2010. Desde luego se cometieron muchísimos errores en el camino pero de eso ya tienen opiniones e información de sobra.

Más repercusiones del partido frente a Uruguay:
- Son tiempos difíciles - Verón, el periodismo deportivo....
- Pentagrama de Cirros - Que la chupen
- Desde el sillón - Que la chupen
- Persiana Americana - Argentina al Mundial
- Antes de la lluvia - Exabrupto.

Y de yapa, recomendamos ESTE link a un post de Antes de la lluvia en el que se analiza la figura de Maradona como entrenador, su relación con la prensa y demás.

Saludos.
SirThomas.

Friday, October 09, 2009

SirEncuestas. Soda vs. Agua con Gas. Recuento.

Con el diario del lunes en la mano, el staff del blog estuvo analizando los votos de esta nueva encuesta, que, sorpresivamente, terminó arrojando un amplio triunfo para la opción más clásica, y de barrio, si se quiere.

La pregunta del día fue: ¿vos cómo le decís, Soda o Agua con gas? Y las polémicas no se hicieron esperar, ya que ya desde el primer mensaje, la señorita Pat ponía sobre la mesa de discusión una de las incógnitas a develar en la encuesta: La soda y el agua con gas, ¿son lo mismo? ¿qué diferencias podemos encontrar entre ambas? Más allá de que algunas referencias habíamos entregado, en opiniones de parte de nuestro staff, los lectores del blog no dejaron de lado ese costado, más que polémico.

Según Pat, entonces, la “Soda” es la que viene en sifón y el agua con gas, en botella. De a poco nos vamos encontrando con algo de luz en este oscuro camino hacia la verdad en torno a la supuesta diferenciación entre una y otra.

SirFather, también conocido como Papone, trajo su linterna (sumergible hasta 30 metros de profundidad) y echó aún más luz a esta eterna controversia:

“Entiendo que la soda usa agua común y el agua con gas es agua mineral gasificada. La diferencia radica en la calidad del agua utilizada. Al menos eso debería ocurrir”, lo cual no deja de tener sentido, pero hasta él mismo deja abierta la posibilidad de que no siempre sea así, con lo cual las dudas permanecen.

En cuanto a las opciones de la encuesta, Pat no nos entregó una respuesta justa, aunque una pista nos dejó al afirmar que, cuando pide lo pide así “Digo "unaguasingas?"

Leo, Chino y Cinzcéu fueron terminantes y coincidentes en sus opiniones, dejando tres votos al hilo para “Soda”, que de esa manera sacaba amplias ventajas en el recuento.

“Agua con gas me suena medio Palermuchi Soho”, agregó Leo a su voto.
“¿Para qué complicarse diciendo "agua con gas"?”, acotó Chino.

Cinzcéu, además de dejar su voto para Soda, nos entregó una breve clase sobre la historia de la Soda en el país.

“Con todo respeto, "agua con gas" es un invento de los... ¿80?, ¿90?. ¡El agua con gas se llama soda, che! La primera mención de Pat- me puso a recordar que hace 40 años ya existía la soda embotellada pero, ¿saben qué?, su marca líder (Córdoba) la posicionaba como "agua de mesa" (???) diferenciándola de la bastarda y sifonera soda”, clarísimo.

(Resultado parcial entonces: Soda 3 vs. Agua con Gas 0).

El lector Cinzcéu, identificado con el bando de la soda, tocó un tema que aquí en este blog pensábamos tratar algún día, con toda la seriedad que se merece, pero ya que él se pronunció sobre la cuestión, lo usamos de disparador para un nuevo SirNo.

En este Blog le decimos NO a la expresión “finamente gasificada”.

Las sabias palabras, extraídas del comentario:
“Capítulo aparte para el "agua finamente gasificada" (!!!) que es un melindre marketinero del nuevo siglo; y que quizás haga de la viejísima soda un talismán "disfrutable" y "redivertido". Eso sí: para ser una sodita, cuesta huevo y pico”, esto último, además de ser cierto, suele suceder un tiempito después de la salida al mercado del “nuevo invento para tomar algo fresco que es igual a algo que ya existía (o no) pero que tiene un nombre re moderno y se vende por sí solo”, ya que al principio los precios suelen ser más económicos (hasta que te instalan el fenómeno en el mercado y ahí agarrate).

Volviendo con el recuento de la encuesta, desde Rosario, nos llegaron dos votos: el señor Meme, sin dudarlo y dudando de la masculinidad de quienes llaman agua con gas a la soda, dejó su voto por el clásico término, que así sube a 4 sufragios a su favor, dejando al término contrario prácticamente sin chances de recuperar terreno.

Este blog no se hace responsable de la expresión “carolo”, que utilizó el lector mencionado, para denominar a quienes llaman agua con gas a la soda.

Además, dejó una queja, apuntando a todos aquellos mozos del país que, a veces, suelen confundir los tantos:

“Algo que ejemplifica este post: cuando pedís Coca cola te traen Pepsi:
"che... pedí COCA COLA, que parte no entendiste"?"
Coca Cola NO PERTENECE pepsi
Sprite NO PERTENECE 7UP
Fanta NO PERTENECE mirinda”

Creo que se entiende y no hace falta dar más explicaciones. Muy clarito Meme en su votación.

El segundo voto llegado desde Rosario pertenece a la señorita Luli, quien agregó algo de confusión a la encuesta, diferenciando los términos que utiliza según la zona geográfica del país en donde pida la bebida:

“en capital cuando pido soda me dicen agua con gas (se ríe) asi es que en Rosario le digo soda y allá agua con gas”.

Repasando los votos entonces, Soda llega a 5 votos, mientras que Agua con gas suma su primero.

Siguiendo con el voto de Luli, nos deja un aporte cultural, muy interesante, que hace relucir, una vez más, las diferentes terminologías que existen en nuestro país; además deja una duda:

“Otra diferencia de este tipo existe con la palabra "choro" (como le decimos en rosario) y "chorro" (como dicen en la capital federal) y me contaron que hace poco no se a quien trataron de bruta por esto.
Yo quería saber como dicen allá... "me chorearon?" o "me chorrearon?"

Los especialistas de nuestro staff ya le entregaron la respuesta, pero aquí la repetimos: yo le digo chorro a los chorros (por ladrones) y chorearon, si es que me han robado los chorros.

César, apoyándose en lo que Meme había dicho anteriormente, suma un voto más para Soda, e insiste con la teoría respecto de la supuesta homosexualidad de los seguidores del término “agua con gas”, e incluso va más allá: “agua con gas" es bien carolo y si no sos carolo sos "preputo", sentenció (citando palabras de Un Hombre Cualquiera, también).

La lectora Val, al igual que Luli, nos deja un voto un tanto confuso, ambivalente, ya que no termina de decidirse por uno de los dos términos: “Yo digo soda, pero si tuviera que pedirlo en un restaurante pediría 'agua con gas' porque así suelen decirle. Nunca lo hice porque esa bebida me parece horrorosa”, sostuvo, explicitando también su rechazo de la bebida.

Y, en su posdata, nos deja una reflexión más que acertada:

“Un gran problema de que en esos lugares le digan "agua con gas" es que muchas veces me he visto en la necesidad de pedir "agua SIN gas", cosa que resulta bastante ridícula”, todo lo cual secundamos desde aquí.

Agregando los votos de César y Val, la votación quedaría de esta manera:

Soda: 7 vs. Agua con gas: 2

Y para finalizar, el señor Mariano (a quien bienvenimos al blog) deja, medio en broma medio en serio, el último voto recibido hasta el momento para la Soda, que llega a 9 (sumando también el voto del staff del blog) y le saca 7 de ventaja al Agua con gas, que se retira del campo de juego con la cabeza gacha, sabiendo que tiene mucho por mejorar.

Y nos deja el siguiente ¿tenemos claro que las aguas saborizadas son exactamente lo mismo que el jugo, no?

Respuesta: Entendemos que sí.

SirEncuestas. ¿vos cómo le decís, Soda o Agua con gas? Resultados finales:
Soda: 10 vs. Agua con gas: 2

Saludos.
SirThomas.

Wednesday, October 07, 2009

SirEncuestas. Vos ¿cómo le decís?

Recuerdo como si fuera hoy uno de los grandes choques culturales que sufrí cuando mi familia decidió mudarse de la Provincia (de Buenos Aires) hacia la Capital (hoy Ciudad Autónoma de Buenos Aires, independiente, en todo sentido, de la Provincia, como ya ha quedado claro en este blog).

El hecho en cuestión sucedió una cálida noche de enero de 1994.

Junto con mi señor padre, regresaba a casa luego de una de nuestras clásicas salidas “a correr”,. Volviendo por la calle S...acha nos encontramos con el Tío Carlos, que estaba en una confitería degustando una cena generosa en carbohidratos. En realidad, él nos vio caminar junto a la ventana del lugar y nos hizo señas para que entremos.

Luego de los saludos y preguntas habituales en este tipo de encuentros, él nos invita a sentarnos a la mesa y nos propone “pidan algo, lo que quieran, yo los invito”. Y así lo hicimos, mi padre pidió una gaseosa Light y yo “agua nomás”.

Para mí sorpresa, cuando el mosaico regresó a la mesa con los pedidos, en vez de traerme “agua nomás”, me trajo “Soda”, o la bebida también conocida como “agua con gas”, o “agua” a secas, en realidad, porque resulta que cuando uno pide “agua” en un restaurante/confitería esto se traduce automáticamente en “agua con gas”, o sea Soda.

Esta pequeña anécdota sobre mi primer encuentro con el "Agua con Gas" sirve de introducción para la siguiente encuesta:

Vos cómo le decís, ¿Soda o agua con gas?

En la mesa de trabajo del blog, cuando se discutió este tema, hubo quienes alzaron la voz argumentando que no son lo mismo, que una cosa es una cosa (la soda) y otra cosa es otra cosa (agua con gas), lo cual si quieren también pueden comentarlo, explicando, si es que las hay, cuáles son sus diferencias.

Para mí, si quiero Soda, pido soda, si quiero agua, pido agua.

Saludos.
SirThomas.

Monday, October 05, 2009

Encuentros fortuitos indeseados.

Luego de hacer mi pedido, menú “soja”, busco, encuentro y me siento “a la mesa” para poder disfrutar tranquilamente del solitario almuerzo. A poco de comenzar, veo de reojo que hace su aparición la figura de un ex compañero de facultad. Desvío la mirada, trato de no encontrarme con la suya, pero es imposible, parece que me vio. Una segunda mirada y un leve “digo que sí con la cabeza” lo confirman. Realizo un rápido paneo por los alrededores de su anatomía para ver si estaba solo o si se encontraba acompañado, dato fundamental que podría influir directamente en sus acciones en el corto plazo. Las peores sospechas fueron confirmadas: estaba solo. Mientras continuaba con la degustación de mi pedido, relojeaba para ver cuál era la posición del sujeto y sus posibles acciones. Por un momento lo pierdo de vista, pero al volver la vista al frente, allí estaba, bandeja en mano en dirección hacia mi persona. Me saludará y seguirá de largo, deseé para mis adentros, pero recordé que no lo había visto acompañado, con lo cual las chances de que suceda lo inevitable crecían segundo a segundo, centímetro a centímetro. De repente, a menos de un metro de distancia, me saluda:

- Qué hacés Sir, cómo andás, tanto tiempo?
- Bien, bien, todo bien, vos, qué tal?
- Acá ando como siempre, te molesta si te acompaño?
- No, no, dale, dale.

La conversación contínua, amenamente, repasando tiempos pasados, preguntando trabajos actuales y demás cuestiones para callar un deseado pero molesto silencio.

Lo que nos preguntamos hoy, aquí en El Blog de SirThomas, entonces es:
Qué hacer cuando uno se topa casualmente por la calle con alguien que no fue más que un “conocido”, alguien con quien uno compartió, por ejemplo, los estudios (secundaria, primaria, o universidad), algún trabajo, o un grupo de amigos, pero con el que, pasado el tiempo, dejó de ver, de estar en contacto, lisa y llanamente porque no pasaba de ser eso: un conocido.

[El siguiente párrafo está auspiciado por Gomería Comas]

Lo ideal, según la visión particular y personal de la gente del staff del blog, ante un caso como estos, es, a lo sumo, realizar un breve intercambio de miradas, como diciendo “hola, sí qué tal, todo bien, sí, me acuerdo de ti, del colegio, qué hacés, todo bien, sí sí”, sin detener ni aminorar la marcha, incluso ésta (la marcha) puede exagerarse un poco a fin de hacer notar que uno está apurado y no tiene el tiempo como para hacer una pausa y ponerse a hablar con el susodicho; un saludo a la distancia, o bien, hacerse olímpicamente el dolobu, a fin de evitar lo incómodo que sería optar por la opción menos indicada, pero que suele ser elegida en un alto porcentaje, es decir, detenerse, saludarse, y entablar un pseudo diálogo sin sentido que ninguno de los dos está animoso por continuar.

Recuerdo que, no hace mucho, me crucé con un viejo compañero de colegio secundario, opté por la alternativa equivocada y no tuve más remedio que entablar comunicación con el sujeto, preguntarle que había sido de su vida, si él o yo nos seguíamos viendo con sultano o mengano, y alguna otra pregunta superficial con respuestas en el mismo tono. El detalle curioso de aquél encuentro es que yo no podía acordarme del nombre del muchacho, mientras que él si lo había hecho (incluso el apellido), con lo cual él se dirigía a mi llamándome por mi nombre y yo sólo atinaba a responder “Eeeh, como andás...espacio en blanco, qué hacés....espacio en blanco”, esforzando mi memoria para tratar de traer al presente su nombre, pero fue en vano, y lo terminé despidiendo con un saludo cordial pero sin poder llamarlo por su nombre.

Volviendo sobre lo que comentaba en el párrafo inicial de este post, en ocasiones solía cruzarme, en el trayecto de mi casa al trabajo, con un ex compañero de “facultad” (el mismo de la anécdota, en realidad) ya que, oh casualidad, trabajamos por la misma zona. En este caso, no tenía problemas en detenerme y ponerme a hablar, más allá de que no nos unía o unió un sentimiento de amistad, porque le ponía mucha onda, por así decirlo, pero como los encuentros se fueron repitiendo, con poco tiempo de separación entre uno y otro, opté por cambiar la ruta a seguir entre mi casa y el trabajo, y desde hace ya un buen tiempo que no me lo cruzo. Fue por el bien de los dos y estimo que lo habrá aceptado sin inconvenientes :P. Y agrego, cuando uno se cruza con alguien luego de mucho tiempo, al primer encuentro tiene más cosas para hablar, o al menos esa es la sensación, pero si luego ese encuentro se reitera, y la relación entre ambas personas reúne las características ya mencionadas, también se reiteran los temas por hablar, porque mucho más no hubo, ni habrá, mal que nos pese (?).

Para terminar, vale aclarar, por si hace falta, que este tipo de encuentros casuales sí son bienvenidos cuando uno se cruza con alguien con quien uno tuvo o tiene una relación más cercana, o cuanto menos amistosa.

Saludos.
SirThomas.

Saturday, October 03, 2009

SirWork. La estaban regando.

Decíamos en el post del último jueves que desde hacía 14 meses no teníamos ninguna novedad positiva respecto del sueldo de nuestro redactor en jefe en su trabajo como asistente de redacción. Finalmente, luego de muchos rumores, y sobre todo silencios, hemos recibido novedades, que por suerte han sido positivas. Nos lo cuenta, el propio SirThomas.

El mes de septiembre no había comenzado de la mejor manera, no sólo por la falta de novedades en torno al sueldo, sino porque con el recibo del mes de Agosto en mano, me entero de que me habían descontado un día por "Inasistencia injustificada". Rememorando, no recordaba haber faltado injustificadamente al trabajo durante ese mes, más sí me había quedado en casa un día, debido a diferentes cuestiones, todas las cuales las podemos resumir en "no me sentía del todo bien como para concurrir a la oficina". Siguiendo los procedimientos habituales, di aviso al laburo para que supieran de la situación y, consecuentemente, enviaran el médico laboral a mi casa para constatar el estado de mi salud. Resumiento, diré que ese fue el día que me descontaron del sueldo porque, según palabras de la contadora de la empresa (quien es, a su vez, algo así como "gerente administrativa") "el informe que me llegó del médico decía que estabas en condiciones de ir a trabajar"; En estos casos es usual que a uno (el facultativo que lo visita) le haga firmar y le deje un comprobante para, llegado el caso, presentarlo en el trabajo. Como esto generalmente no sucede (que yo tenga que entregarle el papelito a la contadora) porque el informe del médico suele coincidir con lo que uno presupone (día por enfermedad, visita del médico, constatación del malestar, día o días justificados) cometí el "error" de no guardar hasta fin de mes el comprobante, que me habría servido para comprobar en papel lo que dijeron mis palabras "pero a mí la médica me justificó el día y eso fue lo que yo firmé". Long story short: al no tener el comprobante, se tuvo en cuenta el informe enviado por e-mail por la médica que decía lo que decíamos oraciones atrás: día no justificado, descuento del sueldo.

Esta situación, que además tuvo una resolución demoradísima (el recibo nos llega el primer día hábil del mes inmediatamente posterior al que se cobra, y la decisión final se tomó cercano al día 20) sumado a las idas y vueltas sobre el aumento del sueldo, provocaron una bronca en mí que, sino fuera por la templaza siempre presente, pudo haber conducido a tomar, tal vez, alguna decisión equivocada.

A todo esto, en la redacción se hablaba, como nunca antes, del aumento que no llegaba, lo cual generaba un clima de malestar general en la oficina, con redactores trabajando a desgano, reduciendo su productividad y con un malhumor evidente que, sin embargo, no llegaba a perjudicar en demasía las relaciones interpersonales de los integrantes de la redacción. Había bronca, sobraban las quejas, pero entre nos(ostros) las relaciones seguían, más o menos, los carriles normales. La bronca no era entre nos(ostros) sino con el jefe, desde luego, pero muchas veces ese malestar puede erosionar las relaciones entre quienes comparten un mismo espacio y que, por las características del trabajo, están en constante conexión, digamos.

Pero bueno, metiéndome de lleno ahora sí en lo que son las novedades que venía a contar, le adelantaba en primicia exclusiva a César Nowhere Man (incluye link a post filosófico) en los comentarios al post del jueves, que, justamente, habían surgido novedades en torno a este tema que tanta polémica generó en la redacción.

Finalmente, diré sin más preámbulos, que el ajuste salarial llegó. Se demoró, se retrasó más de lo acostumbrado, pero ya está acreditado y ya le he sacado provecho (?) adquiriendo unas zapatillas, que por cierto han aumentado considerablemente desde la última vez que había comprado un par, pero de eso quizás hablemos más en extenso en algún otro post.

Pensando en escribir la resolución del conflicto laboral, reflexionaba para mis adentros, por qué razón se me había ocurrido titular el post anterior "14 meses y ninguna FLOR", y la verdad es que no lo se, fijate vos qué curioso, pero a raíz de ese título fueron surgiendo ideas para continuar con aquella idea (?) y por eso el título "La estaban regando" que anuncia este post. Y cómo relacionar a la flor con el sueldo, su riego y mantenimiento. Bueno, básicamente lo que se me había ocurrido fue que en estos catorce meses la flor ya no era la misma, que los embates del clima y del tiempo habían hecho mella en ella (cacofonía mediante de regalo), que su altura ya no era la de sus tiempos mosos, que se le habían caído algunos pétalos, que por más que uno la había cuidado y protegido, diferentes agentes externos se habían encargado en perjudicarla, casi hasta el punto de marchitarla por completo. Pero, como dice el título, aparentemente la estaban regando (si la estaban regando eso podría significar que, de todas formas, le estaban prestando atención y/o cuidando, dirá algún perspicaz lector. Correcto responderé, pero bueno, esa parte como que no me cerraba mucho pero si me hacen la segunda y le hacen la vista gorda, todo el resto de la "metáfora" (?) puede andar). Y para terminar, con esta comparación, diremos entonces que la flor está más fuerte, que se le ha removido la tierra, que compramos algunas semillas nuevas de su misma especie para que le hagan compañía y no se sienta tan sola, que está recién regada y con reservas para un tiempito, pero veremos si esta renovación alcanza hasta la próxima actualización salarial, o a mitad de camino comenzamos a sufrir la sequía.

A todo esto, y volviendo sobre las quejas y lo mucho que se habló el tema en la redacción, agregaré que me dio cierto pudor dar a conocer el porcentaje* que me han aumentado (de hecho, zafé públicamente de hacerlo mediante la frase "prefiero fijarme en mi regreso a casa así el malhumor lo mastico después y no acá"), porque resulta que a los redactores y a otra asistente de la redacción, no le aumentaron de igual manera que a mí. * Esto se debió a que, como todos estaban esperando el sueldo del mes, ansiedad mediante, se fijaron a primeras horas del día cuánto les habían aumentado e, indignación de por medio, como que gritaron a viva voz "es un chiste esto, me aumentaron el x porciento, a mi el z por ciento", y así. También tuvo que ver el hecho de que, en ocasiones anteriores, el aumento era generalizado, en iguales porcentajes para todos.

Esto hizo enojar aún más a los redactores, digo, no que me hayan aumentado más a mí (y a mi co-equiper directa) porque ellos saben que nosotros tenemos los sueldos más bajos y que el trabajo que hacemos es por demás importante, que somos cumplidores, bla bla bla, sino porque ellos esperaban un aumento mayor al que recibieron, debido a varios factores: el tema inflacionario (el ajuste que recibieron no llega a "empatarle" a la inflación interanual, digamos) y el tema de la duplicación en la carga laboral (algunas tareas nuevas que se les sumaron y otra actividad que debieron duplicar en cantidad, resumiendo). Para ponerlo en números y que se entienda mejor, algunos recibieron el 6-7 % de ajuste, otra persona el 12 y mi persona, el 20%, que en parte cubre lo de la inflación y en parte (chiquita, en realidad) la podemos considerar como un aumento.

Hay promesas de que en enero se volverán a retocar los sueldos, seguramente invirtiendo los porcentajes de aumento. Si nos toca (porque quizás no nos toque, vaya uno a saber) volveremos sobre el tema, aunque con mayor poder de síntesis supongo :P.

Bueno, esperando no haber aburrido en demasía, me despido hasta el próximo post.

Saludos.
SirThomas.